Dice un amigo mio...

Dicen que cada día tiene su afán... Es cierto. Trabajemos cada día en el afán de cada día sin que nos agobie una artificiosa agenda de "prioridades". Hagamos, en cada momento lo que tengamos que hacer... y bien, por cierto. Sería más facil no hacerlo así, pero hay que decidirse y meditar:¿qué es lo que quiero, que mi vida sea un jardín o un desierto?

Madre de mi vida... ¡qué gran verdad! 

Me siento tan tan reconocida en esta frase... Y esque yo soy muy floja, ¿para qué nos vamos a engañar? Suelo dejar las cosas, suelo no terminar y rendirme en el camino, pero no por falta de ilusión, sino por la complicación que se presenta cuando hay algo mejor que hacer... ¿estudiar algo que me apasiona? o ¿ver la tele fresquita? 

Siempre hay algo que hace más atractivo ese nuevo plan. Después me arrepiento y vuelta a empezar, con lo que nunca llego a estar satisfecha del todo. Que sería lo ideal. 

Nunca me llego a convencer del todo por si flaqueo en el proximo intento... y claeo, flaqueo y dejo de lado algo medio importante por algo que no vale de nada. No es lo que se debe hacer, lo que es correcto. Por ejemplo, lo que seria correcto es que estudiara todos los dias un poquito... pero no lo hago porque hace calor, estamos en verano, ya empezaré en octubre.... y miles de azones más. Sé que son tonterías que lo que yo quiero está ahí, en el estudio,m más tarde o más temprano tendré mi recompensa... Pero nada... OYE QUE ME CUESTA PONERME  Y SER CONSTANTE (lo peor es que no pospongo las cosas por prioridades, sino por lo contrario).