- Buenos días Daniel... arribita que ya es hora... Chato, vamos tarde.
- Hola Mamá, buenos días, estoy malito, "¡achú achú!" creo que tengo algo muy muy malo, siento mi cara verde... no creo que pueda ir al cole.
A ver si Mamá se lo traga, porque es super super importante mi estado, debo quedarme en casa a ver si puedo hablar con el abuelo, se quedará a cuidarme... y es el mejor aliado de todos los aliados
- Daniel... eso lo inventé yo con los abuelos... ya me lo sé, además... tienes una cara preciosa, estás bien... no tienes ni mal color... vístete y hazme el favor de no perder más tiempo, VAMOS TARDE.
- Pero.........¿y si estoy malo de verdad?
- Naaaada naaada... a vertirse ¡vamos tarde!!- mi madre ya está enfadada.
Yo, en serio, no entiendo nada, con el papelón que estaba haciendo, cómo no se lo ha tragado, pero vaya, como no hay que decir mentiras... supongo que El Señor me perdonará, al fin y al cabo, se sale con la suya... voy al cole... y además estoy bueno.
Camino al cole, encuentro Jaime, mi compañero de mesa y le pregunto sobre la luna... él nunca la había intentado cazar... pero imaginaba que además de lejos... pesaba un montón, ni su padre podría con ella.
La esperanza se me está agotando, no sé qué hacer y esta noche la veré... ¿qué le digo?
(Después del Colegio, en la salida)
No me lo puedo creer! El abuelo ¡ha venido!, ¿sabeis? es mi mejor aliado, ya lo he dicho ¿verdad?
- Hola abuelooo
- Campeón... ¿qué tal el cole? ¿muchas aventuras?
- Pues no, porque me he pasado todo el recreo intentando esconderme de Ella- digo bajando la cabeza, tengo mucha vergüenza de hablar de estos temas tan serios con el Abuelo, por muy aliado que sea, las cosas dan vergüenza.
Es entonces cuando le cuento que no llegaba a la luna, que parecía como si estuviese pegada al cielo, y no había forma.
El abuelo se ha quedado muy serio, no me habla y eso me inquieta, está pensando... pero ¿qué?
- Vamos a comer a mi casa, ¿sabes?, la Abuela te espera, quizás ella pueda aconsejarte, ya sabes... es una mujer.- dijo al fin... con la Abuela me da más vergüenza, pero algo hay que hacer, antes de las nueve de la noche... es cuando la veo en el patio de mi casa
Continuará
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