Un paseo por el Rio Chillar siempre ha sido recomendado, y nunca lo habíamos hecho. Nosotros, recién casados, aprovechamos que unos amigos lo comentaron y fuimos. Una mañana de Julio, yo pensaba que iba a hacer mucho calor, ahí a pleno sol, pero, como corría agua, pues no pasaba nada, con el mismo agua te ibas refrescando. Nos gustó mucho la idea. Ese día nos levantamos muy animados, compramos el pan para los bocatas y la bebida. Cargamos la mochila y esperamos a que llegasen nuestros amigos, quedamos todos debajo de casa, en la rotonda. De camino muy bien hasta que llegamos. El cuadro es el siguiente, no sabíamos dónde comenzaba la ruta y comenzamos casi desde la playa a subir el rio. Un sol aplastante, pero no del todo abrasador puesto que era pronto por la mañana, aun así calor calor.. Al bajar iban todos super equipados, con unos tenis recién comprados en el Decathlon de esos baratos, pero al fin y al cabo preparados para el paseo. Yo como no sabía lo que me iba a encontrar...